lunes, 30 de abril de 2018

DEL FONDO según ENRIQUE VILLAGRASA



Un libro que festeja la poesía desde su óptica es Del fondo (Vinalia Trippers), del leonés Vicente Muñoz Álvarez (1966), con prólogo de Jesús Palacios y epílogo de Pablo Antonio García Malmierca y con ilustraciones de Andrés Casciani, posiblemente el mejor libro ilustrado, en blanco y negro, que yo he visto: “pero prefirió guardar silencio/ y se negó a admitir otra verdad”. La poesía siempre busca la belleza, sea como sea: aunque sea en un abismo.


Enrique Villagrasa, en Librújula


Información y pedidos:

España: vicentevinalia@hotmail.com

Argentina: andrescasciani@gmail.com

Booktrailer: 


viernes, 20 de abril de 2018

DEL FONDO según PABLO CEREZAL



Las delicias del insomnio

Quien no conoce el insomnio no conoce el pánico. Sí, lo sé, el común de los mortales aquejados de insomnio sólo piensan en la terrorífica jornada laboral del día siguiente, en las ojeras como bolsa de la compra reventona de productos caducados, en el escozor de la luz de la oficina cual neón antediluviano y cruel, en tener que regresar a la cama, cuando finalice la jornada y, tal vez, encontrarse de nuevo con la pesadilla de no poder conciliar pesadillas... ni mucho menos placenteros sueños en que una odalisca desvista tules y revista salivas en dedicación exclusiva a la propia polución nocturna. Pero el insomnio es también esa frontera sobre la que vuelan los proyectiles de un futuro cosido en derrotas, ese mendrugo de pan duro en que escarban las hormigas del azar menos azaroso, esa autopsia de tropiezos con víscera de zapato malgastado, ese duelo sin gloria en que batirse contra la mentira en que el reflejo nos reconstruye de amianto y cinismo... el insomnio como cruz de esa moneda que la vigilia lanza al aire para ganarnos la partida, siempre.

Y el insomnio, a pesar de todo, atesora maravillas, como las atesora el dolor en las cicatrices del masoquista, o el látigo que sujeta férreamente el sádico entre sus garfios... garfios: una de las múltiples y tenebrosas imágenes con que Vicente Muñoz Álvarez desgarra la psique del lector de esa joya que ha debido parir en el más oscuro Averno de su propio insomnio. Del fondo, se llama esta crisopeya que maneja nuestros más abismales terrores para proporcionarles áurea textura de ambrosía sensorial, este nuevo artefacto literario que, cual demiurgo enajenado, ha modelado Vicente con los barros del espanto, ayudado en esta ocasión por otro alquimista (del trazo, este): Andrés Casciani. El resultado es un sensacional viaje a los abismos del ser humano.

Prosa poética, poesía cruel, relato de horror, aullido atávico... un viaje, al fin, a lo más profundo del ser humano, ese abismo en que pierde lo único que (por más que se jacte de poseer, además, de inteligencia) tiene: la carne. Porque la mente ya está perdida, y el predicador lo evidencia arrastrándolo más y más al fondo, en una espiral violenta de llanto y desesperación que parece no tener fin y logra que el insomnio mute en juego infantil. Así es Del fondo, así nos lleva Vicente, agarrando con mano firme nuestros intestinos, al fondo de nuestros terrores más ancestrales, así descompone nuestro cuerpo por el camino, así lo recompone en aullidos el trazo delirante de Andrés, el grafismo despiadado y convulso con que ilustra esta, nuestra más deliciosa pesadilla.

Del fondo puede ser la obra definitiva en que Vicente ha volcado, con inigualable maestría, gran parte de sus filias cinematográficas, literarias, culturales, las más oscuras de ellas, a la par que sus fobias más filosóficas. Porque la nueva carne no nacerá de una evolución, sino de esta involución que ya vive la sociedad occidental y en que, felices como cerdos en charco, chapoteamos... pero el charco es de sangre, y por mucho que nos acostumbremos a ello no deja de resultar aterrador. Difícil superar este libro/joya/artefacto, ya. Porque, además, esta es, sin duda, la obra definitiva en que Vicente ha plasmado los abismos/delicias del insomnio, cuando ya todo es carne mancillada porque la mente no te pertenece.

Un libro objeto de una delicadeza bizarra y dolorida, una deliciosa cartografía del abismo en que perderse por horas (todas las que aún restan hasta que nos asuste la luz del día)... un viaje del que es imposible salir ileso. 

Decía al inicio que quien no conoce el insomnio no conoce el pánico. Aquí tiene una oportunidad única de acercarse a él, de la mano de Vicente y Andrés, porque el insomnio, lo sé, viene Del fondo.


Pablo Cereza, en Vislumbres de El Dorado.


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España: vicentevinalia@hotmail.com

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martes, 17 de abril de 2018

DEL FONDO en CULTURAMAS



Del fondo, “Llegar sin desplomaros a vuestro fondo y esencia”, Vicente Muñoz Álvarez

Vicente Muñoz Álvarez, nos trae Del fondo, un relato/poema de terror ilustrado brutalmente -con nuestras vísceras y culpas-, por Andrés Casciani. Un verso arrebatado por H. P. Lovecraft, Crowley, Burns y Cronenberg, entre otros. Una perversión de El jardín de las delicias de El Bosco retratando, en este caso, el inframundo o el fracaso de la creación. Una travesía roja y agónica dentro de uno mismo. Una alegoría de nuestra fe y degradación. Nuestro epitafio zombie, la promesa de luz a cambio de la anulación de la carne. Vicente, radiografía, magistralmente, la putrefacción a la que sometemos nuestras almas en pos de una verdad tan inventada y patentada como triste, tan hueca, tan blanca. Casciani, ilustra en crudo, ese tour por el abismo. Desnudan una luz prometida que deviene fluorescente de cocina y nos desembocan en preferir el deterioro de la carne que ruge y arde, que se mastica y pudre, que sangra, huele y se deshace, a cualquier dictado del predicador. El juego de imágenes, sombras y dobles sentidos, el no saber si seguimos la luz o es ella la que nos asalta y amenaza, nos convoca a la pérdida dentro de uno mismo pero libres. Vicente, y su imprudencia de la lucha, que diría Rimbaud, acaba iluminando el hueco más hondo, bruto, sucio e insondable que albergamos. Una invitación a ser nosotros, a ser túnel, a degradarnos libremente, sin miedo y con toda la oscuridad del mundo.


Julia Roig, en Culturamas


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domingo, 15 de abril de 2018

DEL FONDO según JUANJO RAMÍREZ MASCARÓ



¡JODER! "Del Fondo" de Vicente Muñoz Álvarez, con ilustraciones de Andrés Casciani. Poe-sadilla demoledora y (a partir de ahora) recurrente. Como triturar en una batidora el infierno de Dante hasta convertirlo en casquería, aliñado con lo más sucio de Cronenberg, de Lovecraft, de Alan Moore... Dibujos y textos aliándose para generar una de esas experiencias casi psicotrópicas de las que tanto sabe Vicente. Ya sé con qué voy a soñar hoy.


Juanjo Ramírez Mascaró

viernes, 6 de abril de 2018

DEL FONDO en LA BIBLIOTECA DE MIGUE BORGAS




Reseña «Del Fondo» de Vicente Muñoz Álvarez

Título: Del Fondo
Editorial: Vinalia Trippers producciones
Año: 2018
Género: poesía 
Autor: Vicente Muñoz Álvarez (texto) Andrés Casciani (ilustración)
Ilustraciones: Sí
Páginas:150
Precio: 15€
Conseguido: Ejemplar adquirido al autor mediante el escritor, y amigo, Pablo Malmierca


PRESENTACIÓN

Hoy os traigo una maravilla sacada del rincón más oscuro de la mente del autor Vicente Muñoz, que en cooperación con el ilustrador argentino Andrés Casciani, han creado para recordarnos a todos el poder de la Oscuridad. Y es que esta obra de poesía, con las potentes imágenes, y el diseño interior de maquetación lo convierten en una obra única que cuida mucho la estética y el contenido para contarnos una historia tenebrosa, de conocimiento personal, de destrucción del alma y del mismo ser que se atreve a bajar hasta el fondo mismo de la existencia.

OPINIÓN

Para entrar pronto en materia diré que este libro solo interesará a un sector muy particular de la sociedad lectora, ese nicho de seres que buscamos huir de la luz, que nos gusta disfrutar de la oscuridad de textos trabajados y con las palabras precisas, buscadas y seleccionadas a dedo para así crear un viaje casi espiritual en el que encontrarnos frente a frente con la Nada más inmensa y negra jamás creada. Debo decir que no conocía la obra de ninguno de los autores y ha sido un descubrimiento maravilloso, al impecable estilo del escritor hay que sumar el estilo del ilustrador, basado en garabatos, líneas, rayas... que con la fuerza de la escala de grises nos hará detenernos a dejar que cada texto penetre en nuestra mente a la vez que la fuerza visual de cada doble pagina sea inmisericorde con nuestros ojos para ayudarnos a descender paso a paso en la lectura de este poema desolador y destructor de esperanza.

La historia es muy sencilla, una ciudad es engañada por un predicador para descender a unos túneles para encontrar la salvación, tras hacer caso al «vendehúmos» quedan atrapados en unas galerías oscuras, llenas de peligros abismales y monstruosos, en los que poco a poco van perdiendo su propia esencia humana para convertirse o en criaturas horrendas o en parte viva de las paredes del ser que los cobija. Viajaremos con ellos en su autodestrucción, veremos como a cada paso lo único que encuentran es la muerte de formas horripilantes, tanto por criaturas como por engranajes mecánicos o a manos de sus mentes controladas por el túnel que tanto ansía que forman parte de él. El descenso es siempre hacia abajo en busca de una luz ya extinguida para todos ellos, una esperanza que les abandonó en el mismo momento que pusieron un pie dentro de esas oscuridad viva.

Las situaciones narradas tienen la hermosura intrínseca de la propia muerte, ya he dicho que este libro no es para todos los públicos, como cuando nacen seres de las heridas que tienen los protagonistas, seres que salen de seres y que a su vez generarán otros seres, techos llenos de miembros mutilados que gotean sangre y óxido a partes iguales, ensoñaciones de pesadillas vívidas que atormentan sin descanso a la población al completo de Yillmora. Sin olvidar que todas ellas tienen representación gráfica que nos hipnotizará durante minutos para ayudarnos a comprender, y vivir, el dolor que se nos transmite con cada frase.

Como os decía antes este libro es un viaje, y es un viaje personal, cada persona entenderá la historia de una forma distinta, al menos así lo pienso yo. Muchos lo verán como una historia de terror de unos seres sin suerte, otros podrán ver un reflejo de una sociedad engañada por las religiones y sus fanáticos, habrá quien extrapole a la sociedad actual y verá cada miseria que aquí se narra como un espejismo de algún acto actual. Pero mi opinión es que se trata de un viaje personal, hacia nuestros pensamientos más oscuros, que esos pasajes del horror son nuestros pensamientos e ideas, que somos nosotros mismos quienes nos torturamos en el viaje de la vida, para así llegar al fin mismo de la existencia, el dejar de existir. Cada prueba que se relata aquí va muy ligada a momentos personales de la vida de cada uno, como el proceso de transformación de humano a bestia o los actos de canibalismo devorándonos a nosotros mismos, pues estas grutas están formadas de nuestra carne y sangre, como quien desciende de una depresión insalvable en la que solo se sentirá bien al tocar fondo y una vez allí decidir, si escavar para encontrar una luz aún más oscura o hacer de la oscuridad su hogar por siempre.

CONCLUSIÓN

Es un libro necesario para todos aquellos que buscan ir más allá en su conocimiento de los dones de la Oscuridad, una lectura amena y pesada, en el sentido que caerá en nuestra alma como una losa, que tardaremos mucho en olvidar. Además de tener muchas relecturas y que serán personales tanto por el momento de nuestra vida como por el tipo de persona que somos.

No tengáis miedo ni dudas a la hora de bajar hasta el fondo del túnel oscuro que nos abren estos dos genios, Vicente con sus textos y Andrés con sus ilustraciones.


ENTREVISTA A VICENTE MUÑOZ ÁLVAREZ

1- ¿De dónde sale «Del fondo»? La idea; es un conjunto de tus pesadillas, de tus miedos, de tu mundo interior, es tan solo una historia oscura que te rondaba la mente… Autores referentes a la hora de crear.

Del fondo es una versión revisada, ampliada e ilustrada de un poemario titulado Buscando la luz, que edité con mi sello editorial, Vinalia Trippers, hace ahora justo veinte años, en 1998. Escribí ese libro mientras trabajaba eventualmente en una tienda de cómics, Elektra, influenciado por el cine de David Cronenberg, sobre todo el ciclo de la Nueva Carne, Videodrome, Vinieron de dentro de..., Cromosoma 3, Rabia, etc, por los cómics de Charles Burns, Agujero Negro, Misterios de la carne, Burns Again, y por toda la literatura gótica y de terror del siglo XIX, básica en mi formación, de Allan Poe a H.P.Lovecraft y sus discípulos, pasando por Lautreamont, J.K,Husmans, el simbolismo y el decadentismo, etc, etc. Editamos entonces 300 ejemplares que pronto se agotaron y ahí terminó su andadura. Hasta que hace un par de años Andrés Casciani, un ilustrador habitual de Vinalia Trippers, me propuso ilustrar un libro mío. Estuve un tiempo pensando qué podría cuadrar mejor en su estética, expresionista, tenebrosa y oscura, y decidí enviarle este poemario. Con la particularidad de que al ir a revisarlo comenzaron a salir a borbotones poemas nuevos, tantos como los de la versión original, dando lugar a un libro mucho más completo y extenso. Andrés se entusiasmó con esta segunda versión y se puso inmediatamente manos a la obra, enviándome a partir de entonces cada semana una o varias ilustraciones, hasta completar las más de setenta que incluye el libro.

Por lo demás, Del fondo es un poemario de horror puro y duro, lleno de vísceras, abominaciones y excesos, una exhibición de atrocidades, que diría Ballard, compendio de mis pesadillas, sí, pero también una crítica contra el sistema capitalista y los derroteros que la política y la economía mundial están tomando, de tintes surrealistas y apocalípticos, al más puro estilo Gran Hermano. Hay al menos dos capas de lectura en él, la puramente terrorífica, como un relato de género y un homenaje a literatura gótica y de horror, la más evidente, y otra encubierta y crítica, una denuncia de la alienación a la que conduce el capitalismo, los estragos de la crisis, el control subliminal de los gobiernos y la zombificación del ser humano, quizás aún más terrorífica. Y esa es, por encima del todas las demás, la clave de este libro, esa doble lectura y forma de interpretarlo. Salvando las distancias, quise hacer algo semejante a lo que George A. Romero hizo con La noche de los muertos vivientes, dos películas en una, una de horror y otra de denuncia socioeconómica y política: depende del cristal a través del cual se mire.

2- ¿Cómo surge la idea de ilustrar el relato? Lo tenías pensado desde el principio o fue algo que surgió sin más.

Como te comentaba, la primera versión de este poemario, Buscando la luz, de 1998, constaba de unos cuarenta poemas y no iba ilustrada. Fue a raíz de que Casciani me propusiera ilustrar un libro mío, hace ahora un par de años, cuando decidí revisarlo de nuevo y escribí la versión actual, muy ampliada, que ha ilustrado profusamente Andrés.

3- ¿Por qué los dibujos de Andrés Casciani y cómo fue el trabajo juntos? Le dejabas libertad…

Hay, entre texto e ilustración, una simbiosis inseparable y perfecta, nada más y nada menos que 75 ilustraciones a doble página, una por cada poema, que plasman magistralmente el descenso a los infiernos y el universo claustrofóbico y espeluznante del libro, hasta el punto de, como bien se plantea Pablo Malmierca en el epílogo, no saber qué ha sido primero, si el texto o la imagen, y viceversa. Imposible haber captado mejor la esencia y espíritu del poemario. Durante más de un año fui recibiendo cada semana una o varias ilustraciones y viendo en lo que se iba poco a poco convirtiendo el libro, una Obra de Arte (en mayúsculas).

Y libertad de creación, por supuesto, total: sería impensable justificar si no su impresionante trabajo, que ha hecho de modo totalmente altruista.

4- ¿Si tuvieras que poner una banda sonora a este libro, cuál sería?

La de Begotten, la película de culto de E. Elias Merhige, como anillo al dedo para la ocasión.

5- Planes de futuro.


Escribir, viajar, amar, vivir...

BIOGRAFÍA Y REDES


Vicente Muñoz Álvarez (León, 1966)

Narrador, editor y poeta.

Ha publicado poemarios: Canciones de la gran deriva, 38 Poemash, Privado, Estación del frío, Parnaso en llamas, Animales perdidos, Días de ruta, Gas: Antología poética personal 1999-2016. Relatos y novela: Monstruos y Prodigios (Premio Letras Jóvenes Castilla- León, 1995), El pueblo oscuro, Perro de la lluvia, Los que vienen detrás, El merodeador, Marginales (traducido al italiano), Mi vida en la penumbra, Regresiones. Y ensayo: El tiempo de los asesinos, Cult Movies: Películas para llevarse al Infierno, Cult Movies: Películas para la penumbra.

Ha coordinado las antologías: Golpes, con Eloy Fernández Porta, Tripulantes, con David González, Resaca/Hankover, con Patxi Irurzun, Beatitud, con Ignacio Escuín, El descrédito, con Julio César Álvarez y 23 Pandoras.

Ha sido incluido en numerosas antologías de poesía y prosa contemporánea y organizado, como gestor cultural, diversos festivales y eventos literarios.

Edita el fanzine Vinalia Trippers.





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DEL FONDO según ANA GRANDAL



Páginas que rezuman, tinta espesa que se pega a la piel para corroerla, un túnel que te engulle y te regurgita atónita del viaje. Una simbiosis perfecta entre Vicente Muñoz Álvarez y Andrés Casciani para parir esta travesía alucinada y alucinante.


Ana Grandal

lunes, 2 de abril de 2018

DEL FONDO en POéTIKAS



El pasado vigila al presente e intenta crear un futuro en el que quizá todo acabe despeñándose adentro de un abismo. Un infernal descenso a las profundidades de la condición humana, una lúcida crítica al Capital, al Sistema establecido, en el que los individuos mutan de bestia en bestia, una vez tras otra, en deformes, que caminan adentro de un laberinto en el que no existe salida porque en lo deshumano no hay escapatoria. En Del fondo, Casciani conforma y consigue toda una atmósfera terrible a través de sus ilustraciones, que nos asfixia página a página, que se cose a la prosa de Muñoz, y se anuda a ella a modo de cuaderno ilustrado, que agarra al lector y no le suelta, hasta el final, porque ha de ser leído de una sentada, sí o sí.


Gsús Bonilla, en POéTIKAS